El aire acondicionado es un aparato que en verano puede ser el responsable de gran parte de la factura de la luz. Debemos utilizarlo con sentido, no solo para ahorrarnos dinero, sino para reducir el consumo de electricidad y sobre todo, para asegurar al aparato una larga vida.

Si aún no has adquirido ninguno, el primer consejo es que compres uno eficiente. Aunque la inversión inicial sea algo mayor, se amortizará en poco tiempo con el ahorro en electricidad.

Además, si tienes un equipo que consuma muchísimo puede que no lo enciendas casi nunca con el fin de ahorrar.

Cómo utilizar el aire acondicionado

El consejo más evidente es utilizar la lógica. No podemos tener el aire acondicionado encendido las 24 horas, al igual que no es lo mismo aclimatar una sala para una persona que para seis. En verano, la temperatura óptima de una estancia es de 24ºC, y si queremos ahorrar más energía podemos dejarla en 26ºC.

También debemos evitar los cambios bruscos de temperatura, como abrir las ventanas o las puertas con el aire acondicionado encendido. Si lo hacemos, estaremos forzándolo, pues no alcanzará la temperatura establecida, y por cada grado que bajamos la temperatura se consume un 8% más de energía.

No es necesario poner el termostato en la temperatura más baja con el fin de que enfríe antes la habitación. Lo único que conseguiremos es gastar más energía por el sobre esfuerzo del aparato.

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Casi cualquier aire acondicionado actualmente viene con una función de temporizador. Es recomendable utilizarla para que no se nos olvide apagarlo o dejarlo más tiempo de lo que queríamos. Con un tiempo de unos diez minutos es suficiente para aclimatar una estancia media.

Tampoco es buena idea dejar el aire acondicionado encendido con la idea de que la habitación esté agradable cuando volvamos. Es un gasto de energía innecesario y no necesitamos tenerlo permanentemente encendido.

Dónde colocar el aire acondicionado

A la hora de instalar el aire acondicionado debemos analizar nuestra estancia y ver en qué lugar vamos a sacarle más provecho. Lo ideal es que cumpla con los siguientes puntos:

  • Que cubra el mayor área posible. Es decir, que el flujo de aire sea interrumpido lo menos posible por columnas, esquinas, mobiliario o paredes.
  • Que esté a cubierto. A ser posible en un lugar protegido del sol por toldos, pérgolas o cortinas, ya que si aumentamos su temperatura le costará más ponerse en funcionamiento.
  • Que no esté obstruido. Puede parecer obvio pero en estancias pequeñas solemos colocar los aparatos en esquinas o rincones que se encuentran a pocos centímetros del aire acondicionado. De hacerlo provocaremos lo mismo que en el primer punto.
  • Que se encuentre lo más alto posible. No necesariamente pegado al techo, pero si el aire frío viene de arriba se distribuirá por toda la estancia yendo hacia abajo y el aire caliente se irá hacia el techo. Si el aire acondicionado está demasiado bajo el efecto climatizador desaparecerá en cuanto lo apaguemos.

Cómo limpiar el aire acondicionado

El aire acondicionado acumula gran cantidad de suciedad, por eso es necesario limpiarlo al menos dos veces al año. Hay que prestar especial atención a los filtros, pues retienen una gran cantidad de polvo.

Si no los mantenemos limpios estaremos esparciendo por la estancia toda la suciedad y se llenará de polvo a menudo, una práctica que puede derivar en alergias.

Además, si el aire acondicionado está limpio, expulsará mejor el aire y el circuito no estará obstruido, evitando así fallos repentinos.

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La limpieza de los filtros es muy sencilla. Basta con separar (con cuidado) la tapa del aire acondicionado y limpiarlos con agua y jabón.

Después retirar el exceso de humedad con una bayeta y lo más importante, no volver a colocar la tapa hasta que esté completamente seco, de lo contrario podríamos contribuir a la creación de moho.

Al igual que las limpiezas, son necesarias las inspecciones periódicas al menos una vez al año. Detectar una avería leve a tiempo puede ser la diferencia entre unos euros y una gran factura.

En Comforclima somos profesionales en aire acondicionado y podemos asesorarte con cualquier consulta o daño que sufra tu aparato.

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