Ante las bajas temperaturas, mantener un ambiente cálido y agradable dentro de nuestro hogar es esencial. Ante esto, las energías renovables, como una estufa de pellets, son una gran alternativa con la que podrás conseguir un hogar muy acogedor, al mismo tiempo que ahorras dinero y colaboras en el cuidado del medio ambiente. 

Dentro de las energías renovables, destacan las estufas de pellets, cuyo funcionamiento es muy similar al de las estufas de leña, aunque con algunas diferencias, ya que las estufas de pellets aprovechan mucho mejor la energía. Asimismo, su funcionamiento es completamente automático, por lo que son estufas muy seguras y con las que no hay riesgo de quemaduras. 

Para alargar la vida de nuestros electrodomésticos, es esencial realizar un buen mantenimiento y cuidado de ellos. En el caso de las estufas de pellets, también es necesario prestar atención al grado de limpieza y cuidado. A continuación, te mostramos una guía básica de cuidados para tu estufa. 

Mantenimiento de una estufa de pellets

estufa de pellets

Las actividades de cuidado y mantenimiento de una estufa de pellets son muy sencillas, ya que apenas requiere de cuidados. 

Lo primero que debemos tener en cuenta, es que estas estufas funcionan a partir de la combustión, generando así residuos que deben limpiarse de forma regular, pudiendo incluso realizar esta tarea a diario, si es necesario. Esto es fundamental para garantizar el correcto funcionamiento del aparato. 

Aunque sólo se use de forma ocasional, es recomendable limpiar la cámara de combustión como mínimo una vez a la semana, eliminando así los restos. Debemos tener en cuenta que la frecuencia de limpieza, dependerá de la frecuencia de uso, de tal forma que si se usa la estufa de pellets de forma intensiva, lo recomendable es limpiarla cada dos o tres días aproximadamente. 

Lo cierto es que una estufa de pellets no requiere de demasiados cuidados, simplemente debemos retirar el cenicero donde están las cenizas del combustible, sacudirlo y cepillarlo. También podemos optar por aspirar las cenizas si hace falta. Además, la limpieza del cristal es muy sencilla, y nos permite obtener un mayor rendimiento del aparato.

También podemos optar por el deshollinado químico para limpiar un insert o caldera de pellets. Para ello, simplemente debemos llenar el depósito con pellets deshollinadores, aumentar la temperatura y esperar a que se consuman. Una vez se haya enfriado la estufa, sólo tendremos que aspirar la estufa o limpiarla con un cepillo. 

Por otro lado, se recomienda revisar los conductos y realizar una limpieza en profundidad de la estufa como mínimo un par de veces al año; realizando además una revisión completa del aparato cada dos años, siguiendo para ello las indicaciones del fabricante en cuestión. De este modo, se alargará la vida útil de la estufa y obtendremos una mayor rentabilidad.