En el mercado existen una gran variedad de tipos de estufas diferentes, que funcionan a partir de distintos combustibles. Actualmente, las más comercializadas en España, son las de pellets, las eléctricas o las de butano; aunque existen multitud de opciones diferentes en el mercado. 

Estufas eléctricas

Estas estufas, son de los sistemas de calefacción más utilizadas en los hogares españoles. Su funcionamiento es muy sencillo, emiten calor a través de la convección; por lo que no emiten humos ni gases nocivos. 

Se trata de una opción muy económica y con un mantenimiento muy sencillo. Sin embargo, estas estufas no suelen tener mucha potencia, por lo que se recomienda usarlas en habitaciones pequeñas, o como complemento de calefacción. 

Estufas de butano

Otro de los modelos más comercializados. Este sistema de calefacción, funciona a través de la quema de gas; consumiendo el oxígeno y convirtiéndolo en vapor de agua, dióxido de carbono y calor.

Aunque su precio es más elevado que el de una estufa eléctrica; lo cierto, es que su consumo es mucho más reducido, y son ideales para calentar grandes estancias en muy poco tiempo. Las principales desventajas con las que cuenta este sistema, es su tamaño, superior al de las estufas eléctricas; y el hecho de que las bombonas deben cambiarse cada vez que se agoten.

Estufas de pellets

Estufas

Estas son muy demandadas actualmente, ya que son muy económicas, muy fáciles de utilizar y apenas requieren de mantenimiento. Su uso puede emplearse tanto en grandes como en pequeños espacios, ya que la combustión se adapta al tamaño de la estancia. Por ello, son muy empleadas en hogares grandes y con buena ventilación, que asegure la salida de humos. Al tratarse de un sistema muy eficiente, está muy recomendado para calentar las principales habitaciones de la casa.

Estufas de biomasa

Estas son exactamente iguales a las estufas de pellets; solo que funcionan con otro tipo de combustible. En este caso, emplean una mezcla de distintos combustibles orgánicos. Lo cierto, es que suele ser más cara que las de pellets, pero cuentan con una gran eficiencia. Al igual que las de pellets, se pueden utilizar en grandes viviendas. 

Estufas de leña

Es uno de los sistemas más empleados; aunque actualmente las estufas de leña sse utilizan especialmente en casas rurales o casas vacacionales, situadas a las afueras de las ciudades; ya que proporciona una sensación similar a la de una chimenea convencional. Su funcionamiento es similar al de la estufa de biomasa, aunque emplean una mayor cantidad de leña.

Es un sistema bastante eficiente, que además requiere de mayor mantenimiento que las estufas de pellets. 

Estufas

Estufas de aceite

Estas destacan por tener un funcionamiento muy sencillo y ser muy efectivas; ya que no hay que preocuparse de renovar el aceite constantemente. Estas cuentan con un tipo de aceite especial, que no se quema. Además, son bastante económicas y desprenden mucho calor.

Estufas de gas cataliticas

Este sistema, funciona a través de la radiación térmica, por lo que no precisan de un quemador para su funcionamiento. Esto quiere decir, que no precisan de contacto directo con el fuego; por lo que son bastante seguras. 

Por otro lado, estas estufas no cuentan con demasiada potencia, por lo que suelen utilizarse en estancias pequeñas y bien ventiladas, que ronden los 20 o 30 metros cuadrados.

Estufas halógenas

Las estufas halógenas, calientan el ambiente a través de las resistencias eléctricas, proporcionando calor a través de la radiación. Generalmente, cuentan con distintos niveles de potencia, aunque su uso está indicado para estancias pequeñas.